En línea con la meta ajustada, el Gobierno anunciará próximamente 29 medidas en adaptación y más de 30 en mitigación de descarbonización.
El 12 de diciembre se cumplieron cinco años de la firma del Acuerdo de París, mediante el cual 197 países firmantes se comprometieron a trabajar para mantener el aumento de la temperatura promedio de la Tierra por debajo de los 2 grados centígrados y, en lo posible, por debajo de los 1,5 grados centígrados. Esto, con el fin de evitar los peores efectos del cambio climático.
El compromiso de cada país para lograr esta meta es la Contribución Determinada a Nivel Nacional o NDC (por sus siglas en inglés). El Acuerdo establece que sea revisada cada cinco años bajo el principio de progresión y no retroceso para hacer los ajustes que sean necesarios.
El 26 de noviembre, el presidente Duque dijo que la meta ajustada de reducción de emisiones de Colombia para el 2030 será de 51 % respecto a la línea base de 2010.
Desde la firma del Acuerdo, en el mundo se ha avanzado en el cumplimiento del objetivo global, como en la reduccción de precios de energías renovables y su mayor participación en la generación de electricidad, el establecimiento de metas de reducción de emisiones en grandes empresas y sus cadenas de valor, así como en grandes ciudades.
Igualmente, ha habido desinversión en combustibles fósiles y avances en reconocimiento de riesgo climático en el sector financiero, y una mayor participación y conciencia social alrededor de las metas climáticas.
No obstante, estos avances no son suficientes. Ahora se sabe que el límite de aumento en la temperatura para evitar escenarios catastróficos de cambio climático es 1,5 grados centígrados y que para lograrlo es necesario reducir a la mitad las emisiones de gases efecto invernadero (GEI) para 2030.
Pero, las emisiones globales han seguido aumentando: en 2015 eran aproximadamente 50 billones de toneladas de CO2 y en 2019 fueron 55 billones, un aumento del 10 %.
Ni siquiera con la reducción de emisiones causada por la pandemia del Covid-19 se modificó la trayectoria actual que no logra mantener el aumento en la temperatura global por debajo de los 2 grados centígrados.
En línea con la meta ajustada de Colombia, el Gobierno anunciará próximamente 29 medidas en adaptación y más de 30 en mitigación que definirán la ruta de descarbonización y resiliencia para el país. Las medidas deben estar alineadas con la senda para lograr la carbono-neutralidad en el 2050, así como con las acciones necesarias para la reactivación económica y el aumento de competitividad en el país.
Lograr esta nueva meta implica frenar la deforestación, que es la principal fuente de emisiones en el país (36% del total), además de acciones decididas en sectores como agricultura, energía, residuos y procesos industriales.
Requiere, además de mejor información sectorial y regional, tanto de emisiones como de riesgo asociado a eventos climáticos, así como un portafolio de instrumentos regulatorios y económicos consistente que facilite la transición de estos sectores hacia mayor eficiencia energética, resiliencia, innovación y productividad.
Y, necesita sobre todo del esfuerzo público privado de implementación coordinado y serio para conseguir el resultado deseado sin generar pérdidas económicas y de competitividad. Aquí, no hay espacio para la improvisación, solamente para la acción decidida.
Rosario Córdoba Garcés
Presidenta del Consejo Privado de Competitividad.