El cambio climático es una realidad, y su combate un compromiso ineludible. En varias ciudades de América Latina se está consciente del desafío. Basta subirse a un autobús ecológico en Cartagena, recorrer las nuevas ciclovías de Buenos Aires y Ciudad de México en ‘Ecobicis’ o contemplar cómo cada vez más edificios son construidos bajo una lógica de sustentabilidad con base en ‘códigos verdes’.