Durante los últimos cinco años el país ha perdido siete posiciones en el pilar de preparación tecnológica, ubicándose en el puesto 70 sobre 140 países en 2015 y quedando rezagado frente a otros países de la región. El INC 2015-2016 incluye un capítulo de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC) que aborda los retos asociados a este pilar.
A pesar de los avances importantes en materia de oferta de infraestructura y servicios de TIC, Colombia aún presenta niveles muy bajos en términos de apropiación de las TIC por parte de los ciudadanos, el Gobierno y sectores transversales (e.g. sector educativo, sector salud, rama judicial, etc.). Aún existen retos importantes en términos de convertir el sector TIC en eje de apoyo transversal a los sectores productivos priorizados en el marco de la PDP. Por ejemplo, si bien ha habido algunos esfuerzos de articulación entre los clusters TIC del país y otros sectores, no existe una directriz clara del papel de las TIC como tecnología habilitante de otros sectores más allá del agro en el PND.
Gráfico 1: Absorción de tecnología a nivel de empresa e impacto en las TIC en nuevos bienes y servicios, Colombia vs países de referencia 2015. (1 – 7 donde 7 es mayor puntaje).
Fuente: WEF – GITR (2015).
Entre las principales recomendaciones de este capítulo está la definición de una estrategia de fomento a la apropiación de las TIC en hogares. Si bien es conveniente mantener en el corto plazo esquemas como el de entrega de vivienda de interés social o prioritario con conexión a internet, se sugiere diseñar una estrategia más sostenible financieramente en el mediano y el largo plazo. En ese sentido, se debe trabajar con prestadores de servicio para desarrollar modelos de negocio más flexibles para la provisión de servicios de internet de banda ancha (e.g. incentivar los esquemas prepago y por demanda de banda ancha móvil).
Por otro lado, y con el objetivo de lograr una reducción en los costos de transacción asociados a la utilización de servicios de TIC, el Gobierno debe trabajar en la simplificación del sistema regulatorio. En línea con las recomendaciones de la OCDE, la Comisión de Regulación de Comunicaciones debe ser dotada de mayores facultades sancionatorias de manera que se facilite la implementación de su normativa y se promueva la competencia en el sector (OCDE, 2014). Además, sería conveniente unificar las labores de vigilancia, regulación y sanción en una sola entidad, pues en la actualidad intervienen en el sector diversas instituciones que dificultan el establecimiento de un marco regulatorio simple y eficiente que facilite la adopción de TIC por parte de las empresas.
Finalmente, es crucial el papel a jugar por parte de este sector en el marco de una PDP. Por un lado, será clave que el Ministerio de TIC busque apalancar su agenda de sofisticación del sector a través de las instancias e instrumentos que se estarían definiendo en el marco de esta política. Por otro, se hace necesario articular los esfuerzos de fortalecimiento de este sector con las necesidades en materia de TIC que tengan las demás apuestas productivas del país –tanto del nivel nacional como del local– bajo dicha política.